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Cuando el culto al cuerpo se convierte en lo único que importa y se impone como forma de vida ¿estamos perdidos?

Anda coñe ¿Qué hace aquí el Bosón de Higgs?

No esta en mi mente, ni en mi deseo, despreciar ningún tipo de opción de vida. Es tan respetable cultivar el cuerpo, como la mente, mientras no haya una obsesión malsana. Además desde este blog siempre se ha abogado por la diferencia y por ser un@ mism@, seas como seas.

Pero traigo a colación este tema sobre la tendencia social al culto al cuerpo por una canción que ponía el otro día un amigo en su Facebook que me ha parecido interesante. Un rapero bastante joven, mono y con un toque pijete – algo también muy estereotipo, por qué vamos a engañarnos; y que creo que también podría encajar en dicho programa – les mete mucha caña a los denominados Generación Bíceps y Berzas, personificados claramente en los tronistas y pretendientes/as del programada de Telecinco: Mujeres, Hombres y Viceversa…

[youtube]http://youtu.be/mm5zFUkRH9Y[/youtube]

La letra, que a veces resulta dura y en otras adolece de básica y previsible, deja caer algunas “perlitas” de “sabiduría urbana”, como que la obsesión por el físico llegará un día que no podrá ser suplida por otros valores cuando se “caigan” los atributos físicos o que el mundo en el que se mueve esta “generación” suele ser frívolo e insustancial.

Esta claro que todos queremos mejorar, adelgazar, engordar, ponernos morenos, depilarnos, etc… pero… ¿hasta qué punto vamos a sacrificarnos por la pura estética? ¿Encogimiento del pene o no tener erecciones por los ciclos? ¿Dolores de espalda por pechos postizos grandotes? y así con miles de cosas…

   

Tampoco me gustaría generalizar pero considero que sea cual sea tu “tribu urbana”, es indudable que cada vez se tiene un mayor aprecio por la estética. Da igual si vas subida a unos Jeffrey Campbell con una camisa transparente abrochada hasta el último botón, o si estas embutida en un minivestido de encaje luciendo tu nuevo piercing en el labio. Nos vestimos y nos “makeamos” para impresionar a nuestro entorno…  Esto es asín, todos caemos. ¡Ey, ey, no alarmarse! No me parece bonito tampoco preguntar a la primera de cambio ¿qué libro estas leyendo? o ¿Cómo llevas el Boson de Higgs? pero el equilibrio nuca viene mal. ¿Lo hemos perdido?

  

¿La moda o las tendencias son en partes responsables de esto? Yo creo que en cierta parte si, pero no del todo. Esta claro que las modelos que vemos en los desfiles, editoriales o campañas, para nada se asemejan a las nenas que inundan nuestras calles… La moda crea conciencia y tendencia, pero luego es la sociedad la que la hace estallar y la adopta, y la que prefiere unas exageradas tetas antes que una languidez casi hierática de muchas modelos. No digo con esto que ninguna de las dos opciones sea menos correcta, pero sí que la moda no es sólo una y que cada grupo social escoge y favorece una u otra.

Mi consejo – consejos vendo que para mi no tengo – es que modular y coger lo mejor de cada caso – de la parte física y de la parte mental, sin olvidar la sentimental – sería la manera correcta de tener una vida completa, saludable y lógica donde mente y cuerpo sean uno en “communión: común unión” y no estén relegados el uno al otro, que tanto peca lo mucho como lo poco. Ala, acabo de dar la panacea a la humanidad, a las inseguridades y a la cultura global, ahora a seguirlo todos, muy fácil, ejem, ejem… ¬¬ ¿Encontrar algo así será más difícil que el Boson?

Y toda esta disertación casi sin sentido viene, al fin y al cabo, para comunicaros que he vuelto a retomar la lectura y que voy a empezar por mi cuenta de nuevo la operación macizo, una de cal y otra de arena!


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